El mismo día de su repatriación, autoridades judiciales de México ordenaron prisión preventiva, mientras dure el proceso, de los cuatro policías, entre ellos una mujer, por el feminicidio de la salvadoreña.
Los restos de la salvadoreña Victoria Esperanza Salazar, que perdió la vida a manos de cuatro miembros de la policía de México tras ser sometida, fue repatriado el sábado a El Salvador, según dio a conocer la Cancillería de ese país. El mismo día de su repatriación, autoridades judiciales de México ordenaron prisión preventiva, mientras dure el proceso, de los cuatro policías involucrados en la muerte de la salvadoreña.
En una serié de tuits difundidos por la Secretaria de Comunicaciones del Gobierno de El Salvador se conoció que el féretro con los restos de Salazar llegaron al país escoltados por su madre Rosibel Arriaza, y las dos hijas de Victoria.
Las menores de edad fueron recibidas en el Aeropuerto Internacional Oscar Arnulfo Romero, por miembros del Consejo Nacional de la Niñez y de la Adolescencia y el Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer, entre otras instituciones.
Tras su llegada a suelo salvadoreño, los restos de Victoria fueron trasladados bajo escolta policial a una funeraria donde serán velados al suroeste de la capital San Salvador.
Edwin Olivares, padrastro de Victoria y citado por AFP agradeció la ayuda del gobierno.»Esto trae un montón de emociones encontradas, hay mucho dolor, mucha consternación», señaló delante de la funeraria Olivares, el único familiar que habló con la prensa.
Victoria Esperanza Salazar, de 36 años residía en México bajo el amparo de una visa humanitaria desde 2018, fue sometida por un grupo de policías quienes la detuvieron por presuntamente haber alterado el orden público el pasado 27 de marzo en los alrededores del balneario turístico de Tulum.
Policías procesados por feminicidio
El juez a cargo del caso determinó que la fiscalía había presentado elementos suficientes para «comprobar la probable participación de los cuatro policías en el delito de feminicidio», por lo que se les dictó prisión preventiva mientras dure el proceso, señaló un comunicado.
Asimismo, se otorgaron cuatro meses de investigación complementaria a los fiscales.
Por el caso también fue apresado la semana pasada la expareja de Salazar, cuya identidad no se ha dado a conocer, quien es señalado de haber presuntamente abusado de una de las hijas de la salvadoreña.
La muerte de la mujer, ha motivado protestas de organismos internacionales y grupos defensores de los derechos humanos que acusan a las fuerzas de seguridad mexicanas de racismo y misoginia. El Gobierno de El Salvador ha montado toda una campaña entorno al caso para pedir justicia.
Organismo como Amnistía Internacional, ONU, OIM, ACNUR y la ONU-DH, exigen a las autoridades mexicanas una respuesta libre de ‘impunidad” contra los perpetradores.
“Consideramos inaceptable que en México sigan ocurriendo abusos policiales como el feminicidio de Victoria. Las autoridades deben fortalecer las corporaciones policiales con capacitación especializada en el uso adecuado de la fuerza, para evitar las graves violaciones de derechos humanos cometidas por quienes deberían de protegernos”. Apuntó Amnistía Internacional en una nota de prensa.
Reporte Alianza VOA