El líder del Congreso y reconocido por más de 50 países como mandatario interino de Venezuela, Juan Guaidó, no descartó abandonar el país, asegurando que la «la persecución se va a acrecentar» tras las elecciones legislativas del 6 de diciembre que dieron una amplia mayoría al chavismo.
«El riesgo está latente, el riesgo existe todos los días en Venezuela», dijo el opositor a la cadena británica BBC. «De hecho, hace dos años, me secuestraron, y esa fue la segunda vez que he pasado por esto, enfrentando la dictadura de Maduro, pero el sostenimiento de la resistencia interna en la lucha contra una dictadura es central», añadió.
Venezuela celebró elecciones legislativas el domingo y el chavismo logró una amplia mayoría en el Parlamento que actualmente es liderado por Guaidó y cuyo periodo vence el 5 de enero de 2021, por lo que el opositor perderá su inmunidad parlamentaria.
La presidente del Consejo Nacional Electoral, Indira Alfonso, anunció la tarde del lunes un segundo boletín de los comicios celebrados el 6 de diciembre.
Con un 98.63% de las actas contabilizadas, el movimiento oficialista Gran Polo Patriótico sumó unos 700.000 votos más a los 3.558.320 anunciados la madrugada del lunes por el órgano electoral. En total, el chavismo obtuvo 4 millones 277 mil 926 votos, para un 68.43%.
El chavismo tiene hasta el momento 36 de los 48 cargos asignados por la modalidad lista a nivel nacional.
Los movimientos políticos que desobedecieron el llamado a la abstención de los principales líderes de oposición y decidieron participar en la contienda, obtuvieron 1.354.610 votos (21.67%).
El lunes, El Grupo de Lima, Estados Unidos y la Unión Europea anunciaron que no reconocerán los resultados de las elecciones legislativas.
A través de un comunicado, los gobiernos de Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Santa Lucía, reiteraron que los comicios celebrados el domingo en Venezuela, «organizados por el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro, carecen de legalidad y legitimidad porque fueron llevados a cabo sin las mínimas garantías de un proceso democrático, de libertad, seguridad y transparencia, ni de integridad de los votos, ni la participación de todas las fuerzas políticas, ni de observación internacional».
El Secretario de Estado, Mike Pompeo, dijo en un comunicado que «el régimen ilegítimo de Maduro en Venezuela organizó una farsa política que pretendía parecer elecciones legislativas».
«Ni Maduro ni una nueva Asamblea Nacional elegida fraudulentamente representarán la voz legítima del pueblo venezolano, que debe expresarse a través de elecciones presidenciales libres y justas», sostuvo Pompeo.
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