Foto: Vía @BalkangInsig
Este miércoles, el secretario de Estado de EE.UU, Antony Blinken, prohibió la entrada a la nación norteamericana al antiguo presidente y ex primer ministro albanés, Sali Berisha.
La decisión del gobierno norteamericano fue motivada por «corrupción significativa» y afectaría también a la familia cercana de Berisha.
Blinken notificó que los actos de corrupción del expresidente albanés Sali Berisha socavaron la democracia en Albania, por lo tanto tanto Berisha como los miembros de su familia no están autorizados para ingresar a Estados Unidos.
En este sentido, el secretario de Estado, dijo que Sali Berisha gozando de su puesto como primer ministro, estuvo involucrado en casos de malversación de fondos públicos e injerencias en procesos públicos.
Además, informó que el dirigente usó el poder para su beneficio y logró enriquecer a sus aliados políticos y desde luego a gran parte de los miembros de su familia. «Todo a costa de la confianza del pueblo albanés», mencionó el secretario de Estado.
El secretario de Estado informó además, que el ex primer ministro albanés estaría dispuesto a protegerse, así como a su familia y socios, de ciertas investigaciones que los incriminen.
La familia de Berisha afectada por la decisión estadounidense incluye a su esposa, Liri Berisha, y a sus dos hijos, Argita Berisha Malltezi y Shkelzen Berisha.
Con esta decisión, Estados Unidos reafirma su compromiso con las reformas políticas que Albania está realizando en sus instituciones democráticas, una condición impuesta por Bruselas para dar inicio a las negociaciones de adhesión del país a la Unión Europea.
Adayris Castillo/ Redacción america24horas.com