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Las autoridades rusas dijeron el 17 de octubre que en lad ultimas 24 horas se registraron 34.303 nuevas infecciones por COVID-19 y 999 muertes.
Sin embargo, a pesar del creciente número de víctimas, el Kremlin ha descartado un nuevo bloqueo a nivel nacional como el que se produjo al principio de la pandemia que afectó gravemente a la economía. En cambio, ha delegado el poder de hacer cumplir las restricciones del coronavirus a las autoridades regionales.
Las estadísticas ascendentes de COVID-19 en Rusia se producen cuando la campaña de vacunación del país está paralizada y muchas personas siguen siendo escépticas sobre las vacunas.
Las autoridades rusas han intentado acelerar el ritmo de las vacunas con loterías, bonificaciones y otros incentivos, pero las encuestas independientes muestran que más de la mitad de los rusos no planean vacunarse.
El gobierno dijo esta semana que solo unos 43 millones de rusos, o alrededor del 29 por ciento de los casi 146 millones de habitantes del país, están completamente vacunados.
RFE/RL