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El presidente francés Emmanuel Macron y el ruso Vladimir Putin tienen previsto hablar por teléfono el 20 de febrero para discutir la escalada de tensiones sobre Ucrania.
Se produce cuando los líderes occidentales dicen que Rusia, que ha desplegado decenas de miles de tropas cerca de Ucrania, está planeando un ataque en toda regla contra su vecino. Moscú dice que no tiene planes de incursión.
Mientras tanto, una misión de monitoreo de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) informó un “aumento dramático” en las violaciones del alto el fuego en la volátil línea del frente entre el ejército ucraniano y los separatistas respaldados por Rusia en el este de Ucrania en los últimos días.
La OSCE dijo el 19 de febrero que se habían producido 1.500 violaciones del alto el fuego en las regiones de Donetsk y Lugansk en un solo día.
El mismo día, Ucrania dijo que dos de sus soldados habían muerto en un ataque, las primeras muertes en el conflicto en más de un mes.
Ucrania suspendió el 20 de febrero las operaciones en uno de los siete puestos de control en el territorio de la región oriental de Donbas controlado por separatistas respaldados por Rusia debido a los intensos bombardeos, dijo el ejército ucraniano.
Estados Unidos dice que, con alrededor de 150.000 soldados rusos en las fronteras de Ucrania (hasta 190.000, si se incluyen las fuerzas separatistas respaldadas por Rusia en el este de Ucrania), Moscú ya ha decidido invadir.
Alrededor de 30.000 soldados rusos se encuentran en Bielorrusia para un ejercicio que finalizará el 20 de febrero.
En Washington, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, quien anteriormente dijo que estaba «convencido» de que Rusia invadiría en los próximos días, convocó una reunión del Consejo de Seguridad Nacional sobre la crisis el 20 de febrero.
RFE/RL, basado en información de AP y AFP