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Moldavia anunció que cerraría su espacio aéreo debido a la guerra en la vecina Ucrania, poco después de que la presidenta Maia Sandu dijera que Chisinau introduciría el estado de emergencia y estaba lista para aceptar a decenas de miles de personas que huían de Ucrania después del ataque ruso.
«Ayudaremos a las personas que necesitan nuestra ayuda y apoyo», dijo Sandu el 24 de febrero.
Sandu dijo que había convocado una reunión del Comité de Situaciones Excepcionales para decidir sobre una serie de medidas para gestionar el aspecto humanitario de la crisis.
La ministra del Interior de Moldavia, Ana Revenco, dijo que, hasta el momento, 1.900 ciudadanos ucranianos habían cruzado a Moldavia el 24 de febrero.
Los corresponsales de RFE/RL informan que las autoridades moldavas han comenzado a establecer centros de triaje y asistencia en dos cruces fronterizos con Ucrania: Ocnita y Palanca. Según el Ministerio del Interior de Moldavia, los centros también estarán preparados para ofrecer alojamiento a una serie de refugiados durante 72 horas.
Decenas de vehículos hacían fila en la frontera entre Ucrania y Moldavia, según los sitios web de los medios moldavos . Moldavia tiene una frontera de 1.222 kilómetros con Ucrania.
Sandu instó a todos los moldavos que se encuentran en Ucrania a regresar de inmediato.
Rumania, miembro de la UE, que tiene una frontera de 650 kilómetros con Ucrania, también ha visto un aumento en el número de llegadas de ucranianos en el cruce fronterizo de Sighetu Marmatiei, pero según los funcionarios locales, los ciudadanos ucranianos que cruzan a Rumania buscan continuar viajando hacia Polonia y la República Checa.
RFE/RL