Cortesia
El máximo tribunal de la ONU ordenó a Rusia que cese sus operaciones militares en Ucrania, y los jueces señalaron que estaban «profundamente preocupados» por la invasión no provocada de Moscú a su vecino el mes pasado.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya, dijo en un fallo el 16 de marzo que los jueces votaron 13-2 a favor de la orden, que se deriva de un caso presentado por Kiev sobre las acusaciones rusas de genocidio por parte de Ucrania, que Moscú utilizó como uno de los pretextos para lanzar la invasión el 24 de febrero.
«El tribunal es muy consciente de la magnitud de la tragedia humana que está teniendo lugar en Ucrania (…). El tribunal está profundamente preocupado por el uso de la fuerza por parte de la Federación Rusa en Ucrania, lo que plantea problemas muy graves de derecho internacional», dijo el juez Joan Donoghue al leer el fallo en el tribunal.
Los jueces de la CIJ también dictaminaron por una votación de 13-2 que Moscú debe garantizar que «cualquier unidad militar o armada irregular que pueda ser dirigida o apoyada por ella, así como cualquier organización y persona que pueda estar sujeta a su control o dirección, no tomen medidas para promover las operaciones militares mencionadas en el punto».
Ambos fallos fueron ordenados a la espera de una decisión final en el caso.
El tribunal también dijo que ambas partes deben «abstenerse de cualquier acción que pueda agravar o extender la disputa ante la Corte o dificultar su resolución».
La CIJ resuelve las quejas legales presentadas por los Estados sobre presuntas violaciones del derecho internacional. Es la institución judicial suprema de las Naciones Unidas.
Si bien sus decisiones son vinculantes, es poco probable que Moscú preste atención a la decisión del tribunal.
Rusia boicoteó la audiencia sobre el caso a principios de este mes y argumentó en una presentación escrita que el tribunal no tiene jurisdicción. También dijo que estaba actuando en defensa propia con la invasión.
RFE/RL