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Un depósito de combustible ruso no lejos de la frontera con Ucrania ha explotado y funcionarios rusos dicen que las fuerzas ucranianas usaron helicópteros para atacar las instalaciones.
Los funcionarios de defensa ucranianos se negaron a comentar directamente sobre los informes de que las fuerzas ucranianas estaban detrás del ataque del 1 de abril. El secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Ucrania negó rotundamente el informe
De confirmarse, sería el primer ataque en suelo ruso por parte de Ucrania desde que Moscú invadió hace más de un mes. También sería el primer ataque militar en suelo ruso por parte de una fuerza extranjera desde la Segunda Guerra Mundial.
Un video publicado en las redes sociales a primera hora del 1 de abril mostró una explosión y llamas en el cielo nocturno antes del amanecer cerca de Belgorod, que está a unos 25 kilómetros de la frontera con Ucrania.
Otros videos mostraron lo que dijeron que eran helicópteros cerca de Belgorod disparando cohetes o misiles.
En declaraciones a los periodistas, un portavoz del Ministerio de Defensa ucraniano se negó a comentar directamente si sus fuerzas eran responsables de la explosión, pero dijo que sus fuerzas armadas estaban llevando a cabo «operaciones de defensa» contra Rusia en general.
«Ucrania está llevando a cabo actualmente una operación defensiva contra la agresión rusa en el territorio de Ucrania, y esto no significa que Ucrania sea responsable de cada catástrofe en el territorio de Rusia», dijo Oleksandr Motuzyanyk. «No confirmaré ni negaré estas acusaciones».
Oleksiy Danilov, secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Ucrania, más tarde emitió una negación rotunda. «Por alguna razón dicen que lo hicimos, pero en realidad esto no se corresponde con la realidad», dijo Danilov en la televisión ucraniana.
La petrolera estatal Rosneft, propietaria del depósito de combustible, dijo en un comunicado separado que nadie resultó herido en el incendio. No dio información sobre la causa.
Mientras tanto, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el incidente podría socavar las negociaciones entre los representantes rusos y ucranianos.
«Ciertamente, esto no es algo que pueda percibirse como la creación de condiciones cómodas para la continuación de las conversaciones», dijo Peskov a periodistas en Moscú.
RFE/RL