Foto: ONU
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, ha instado al Consejo de Seguridad de la ONU a buscar la plena rendición de cuentas por los crímenes que, según él, fueron cometidos por las fuerzas rusas en Ucrania.
Zelenskiy habló con el consejo el 5 de abril, proporcionando detalles gráficos de los eventos que tuvieron lugar en la ciudad de Bucha, donde dijo que familias enteras fueron asesinadas indiscriminadamente, particularmente aquellos que habían servido a las fuerzas ucranianas en alguna capacidad.
La gente «fue asesinada en sus apartamentos, casas… los civiles fueron aplastados por los tanques mientras estaban sentados en sus autos en medio de la carretera, solo por placer [de los soldados rusos]», dijo Zelenskiy al consejo de 15 miembros en un discurso de video en vivo.
«Las mujeres fueron violadas y asesinadas frente a sus hijos, les sacaron la lengua solo porque los agresores no escucharon lo que querían escuchar de ellas», dijo. «Esto no es diferente de otros terroristas como Daesh (Estado Islámico)… y aquí lo hace un miembro del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas».
Dijo que los crímenes cometidos en Bucha fueron «los crímenes de guerra más terribles» desde la Segunda Guerra Mundial y que Bucha fue «solo uno de los muchos ejemplos de lo que los ocupantes han estado haciendo en nuestra tierra durante los últimos 41 días».
Zelenskiy, quien habló un día después de visitar Bucha, dijo que dondequiera que se han desplegado tropas rusas, las ruinas y las fosas comunes han quedado atrás.
Zelenskiy agregó que «decenas de miles» de ucranianos habían sido deportados a Rusia, diciendo que Rusia «necesita nuestra riqueza, nuestra gente», y acusó a los soldados rusos de robar todo, desde comida hasta aretes de oro de los ucranianos.
El embajador ruso ante la ONU, que habló ante el consejo después de Zelenskiy, negó la afirmación de deportaciones masivas y que las fuerzas rusas han atacado a civiles.
«Ahora, en general, desde el comienzo de la operación militar especial, más de 600.000 personas han sido evacuadas a Rusia, incluidos más de 119.000 niños», dijo Vasily Nebenzya.
«Y no estamos hablando de ningún tipo de coerción o secuestro, como a nuestros socios occidentales les gusta presentar esto, sino más bien de la decisión voluntaria de estas personas, como lo atestiguan muchos de estos videos que son accesibles en las redes sociales», dijo al consejo.
El presidente ucraniano pidió a las Naciones Unidas no solo que actúen de inmediato para que Rusia rinda cuentas por las muertes de civiles en Bucha, sino también que expulsen a Rusia del consejo, que no ha podido tomar ninguna medida más allá de aprobar resoluciones no vinculantes sobre la invasión de Rusia porque Moscú tiene poder de veto.
«Estamos tratando con un estado que convierte su veto en el Consejo de Seguridad de la ONU en el derecho a [causar] la muerte», dijo Zelenskiy.
Dijo que las Naciones Unidas deben examinarse detenidamente a sí mismas y preguntarse si el tiempo del derecho internacional ha terminado. Pidió una reforma de la Carta de la ONU y un tribunal internacional de crímenes de guerra similar al que juzgó a los nazis después de la Segunda Guerra Mundial.
«Las Naciones Unidas pueden simplemente cerrarse. Señorías, ¿están dispuestos a cerrar la ONU? ¿Y el tiempo del derecho internacional se ha ido?», preguntó. «Si tu respuesta es no, entonces debes actuar de inmediato».
Su discurso se produjo después de la indignación mundial por los descubrimientos de víctimas civiles en Bucha después de que las tropas rusas se retiraron. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha pedido un juicio por crímenes de guerra, y Estados Unidos y Gran Bretaña han pedido la remoción de Rusia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
«Lo que hemos visto en Bucha no es el acto aleatorio de una unidad deshonesta. Es una campaña deliberada para matar, torturar, violar, cometer atrocidades», dijo el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, antes de partir a una reunión de la OTAN en Europa.
Washington y la Unión Europea han prometido más sanciones económicas destinadas a obligar al presidente Vladimir Putin a detener la guerra.
La UE anunció un quinto paquete de medidas que apuntaría a las exportaciones de petróleo y carbón y prohibiría que los barcos rusos ingresen a los puertos europeos, mientras que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos dijo que Rusia ya no podría pagar su deuda externa con dólares mantenidos en bancos estadounidenses.
RFE/RL