Más de dos tercios de los chilenos votaron el domingo para cambiar la Constitución instaurada por el régimen militar (1973-1990), anunció el Servicio Electoral del país.
Con un 76.54% de las mesas escrutadas, la opción «Apruebo» obtenía un 78.12% de los votos, frente a un 21.88% que optó por mantener la actual Carta Magna del dictador Augusto Pinochet.
En entrevista con América 24horas, el expresidente de la Cámara de Diputados de Chile, Marco Núñez sostuvo que el actual presidente chileno, Sebastián Piñera, no pensó enfrentar una situación como la que vive hoy día el país que demanda un cambio constitucional.
Sobre el resultado del plebiscito de esta Jornada, Núñez indicó que no sólo la oposición al presidente Pinera votó por un cambio a la Constitución si no también miembros de la centroderecha que respaldó inicialmente al gobernante.
«Esto ( el resultado) no significa que la oposición a Piñera sea de esta magnitud. Hay varios oficialistas en Chile que votaron apruebo y se suman a esta gran mayoría de casi el 80%».
Tras el histórico resultado, en abril de 2021 se elegirán a los 155 constituyentes que serán los encargados de redactar la nueva Carta Magna que luego será sometida a votación popular a mediados de 2022.
Consultado por el editor Web, Alejandro Mendoza, si el presidente Sebastián Pinera- electo en diciembre de 2017- debía renunciar ya que al comienzo no estaba de acuerdo con la realización de la consulta, el exdiputado aseguró que «no creo que esa sea una consecuencia del día de hoy. El presidente Sebastián Piñera debe gobernar hasta marzo de 2022».
«La gente quiere un cambio importante que está orientado a la retribución del ingreso y que las oportunidades estén al alcance de todos», sostiene.
Un violento estallido social en octubre de 2019 derivó en multitudinarias protestas callejeras en las que centenares de miles de personas expusieron su descontento con las políticas sociales en salud, educación y pensiones, entre muchas otras, que los partidos políticos buscaron descomprimir con la convocatoria un mes después al plebiscito constitucional.
«Existe una clase media muy importante en Chile que cada vez pide y exige más oportunidades y posibilidades de integrarse a la educación, a la salud. A una jubilación digna», asevera el político. «Chile es un país desigual como la mayoría de los países latinoamericanos».
Se desconoce si los pueblos originarios de Chile, en torno al 10% de sus 19 millones de habitantes, tendrán escaños preferentes, pues el oficialismo y la oposición no han logrado un acuerdo sobre el tema en el Congreso.
«Yo espero que Piñera escuche la voz de la gente y que él inicie la inversión social masiva en los sectores sociales que lo requieren, particularmente en lo más pobres».
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