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El presidente kazajo, Qasym-Zhomart Toqaev, dice que su país respeta la integridad territorial de Ucrania, que ha sido atacada por Rusia.
Escribiendo en la revista National Interest, Toqaev dijo que si bien Kazajstán compartía una larga frontera con Rusia, también tenía «una profunda tradición de relaciones amistosas con Ucrania».
«Respetamos su integridad territorial, como lo hace la abrumadora mayoría del mundo», escribió Toqaev, y agregó que espera que los combates entre Rusia y Ucrania terminen rápidamente «de acuerdo con la Carta de la ONU».
«He estado en comunicación directa con los presidentes Vladimir Putin y Volodymyr Zelenskiy, instando al diálogo y a una solución pacífica de las hostilidades. Kazajstán está dispuesto y es capaz de continuar su papel como mediador internacional», dijo Toqaev.
Toqaev continuó en el artículo para hablar sobre las mortales protestas antigubernamentales que sacudieron Kazajstán a principios de enero y llevaron a la eliminación de su predecesor, Nursultan Nazarbaev, de la escena política del estado de Asia Central rico en petróleo.
Toqaev calificó la violencia que se cobró al menos 230 vidas como «una tragedia» y dijo que había lanzado lo que llamó «reformas históricas» para mejorar la situación en la ex república soviética estrechamente controlada.
«El país se está embarcando en una descentralización sin precedentes del poder estatal, mejorando los controles y equilibrios. La corrupción y el nepotismo no serán tolerados. La concentración del poder político y la acumulación de riqueza en manos de unos pocos deben revertirse para que este país prospere», escribió Toqaev.
Desde la violencia mortal, Toqaev también ha estado tratando de distanciarse de Nazarbaev y su sistema que se remonta a 30 años hasta antes del colapso de la Unión Soviética en 1991. Anunció reformas bajo el lema «¡Construyamos un nuevo Kazajstán!»
Sin embargo, muchos en Kazajstán dicen que Toqaev primero debe explicar por qué ordenó a las fuerzas de seguridad, el ejército y la policía disparar a matar sin previo aviso durante las protestas de enero, así como la verdadera razón por la que invitó a las tropas de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva liderada por Rusia a Kazajstán durante las protestas.
Miles de personas fueron detenidas después de las manifestaciones que se convirtieron en desorden, que Toqaev dijo que fueron causadas por «20.000 terroristas» del extranjero, una afirmación de la que no ha proporcionado pruebas.
Mientras tanto, algunos expertos han rechazado la propuesta del presidente kazajo de limitar los poderes de su oficina como un movimiento populista diseñado para apaciguar al público después de los sangrientos disturbios, diciendo que está haciendo movimientos que en realidad no lo verán renunciar a ningún poder «real».
RFE/RL